Mostrando entradas con la etiqueta 17 DE DICIEMBRE. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta 17 DE DICIEMBRE. Mostrar todas las entradas

domingo, 22 de noviembre de 2020

17 DE DICIEMBRE

 PRIMERA LECTURA. Génesis 49,2.8-10.

2Agrupaos y escuchadme, hijos de Jacob, oíd a vuestro padre Israel:
8A tí, Judá,
te alabarán tus hermanos,
pondrás la mano sobre
la cerviz de tus enemigos,
se postrarán ante ti
los hijos de tu madre.
9Judá es un león agazapado:
has vuelto de hacer presa,
hijo mío;
se agacha y se tumba
como león
o como leona,
¿quién se atreve a desafiarlo?
10No se apartará de Judá el cetro
ni el bastón de mando
de entre sus rodillas,
hasta que le traigan tributo
y le rindan homenaje
los pueblos.

Explicación.

49,1-2 El paralelismo identifica a Jacob con Israel.

49,8-10 "Te alabarán" interpreta el nombre Yehuda; resuena en el siguiente "tu mano" yadeka. Tres valores realzan su figura: el poder dominador del león, la riqueza agraria de viñedos, la belleza corporal, "ojos dientes". Se pueden escuchar además alusiones veladas a espisodios precedentes: el león a 37,33, el bastón (cetro) a 38,18-25.

Judá es el antecesor de la dinastía davídica. David unifica todas las tribus bajo su mando y extiende su dominio a vasallos extranjeros. El león es su animal emblemático (Nm 24,9; Ap 5,5). En el v.10 traducimos "rodillas" (pies) en sentido físico; otros lo toman como eufemismo de sus partes pudendas, significando que el cetro se transmitía en la dinastía. En la segunda parte leemos yuba´say lô = le sea traído tributo (cfr. Is 18,7; Sal 68,30; 76,12; Is 18,7.

Salmo. 72,1-4.7-8.17.

1Oh Dios, confía tu juicio al rey,
tu justicia a un hijo de rey.
2Que rija a tu pueblo con justicia, a tus afligidos con rectitud.
3Que montes y colinas traigan al pueblo
paz por la justicia.
4Que defienda a la gente oprimida,
que salve a las familias pobres
y quebrante al opresor.  
7Que en sus días florezca el honrado
y haya prosperidad hasta que falte la luna.
8Que domine de mar a mar,
del Gran Río al confín de la tierra. 17Que su nombre sea eterno,
frente al sol retoñe su nombre.
Que todos los pueblos lo feliciten
y lo invoquen como bendición. 

Explicación.

72,1-3 La primera sección presenta a los personajes: Dios, el rey y un escenario de montañas. Dios es la primera palabra del poema. Posee una justicia suya, que ejerce en el gobierno del mundo y que delega para que su pueblo conviva en la justicia: cfr. 2 Cr 19,6. El reyes "hijo de rey", es decir, de estirpe real, davídica, no usurpador; está en función de "tu pueblo", que es de Dios y no suyo, y es hoy un pueblo "afligido": ¿por un dominio extranjero despótico?, ¿por abusos de gobernantes anteriores? "Montes y colinas" pueden representar el paisaje, la configuración de Judá: Ex 15,17; 1 Re 20,23; Is 14,25 etc.

72,4 El juicio / gobierno será "salvación" para un proletariado de pobretones; pero exige enfrentarse con el opresor. 

72,7 A la lluvia responde la tierra germinando y floreciendo; sólo que aquí lo que florece es "un honrado"; a no ser que leamos "justicia", en buen paralelismo con "prosperidad".

72,8 Fronteras de un soberano que impone su autoridad sobre reinos vasallos. "De mar a mar" en sentido realista sería del Mar Muerto al Mediterráneo; en sentido cosmológico, las fronteras del gran océano que rodea los continentes. "El Río" suele designar el Éufrates: Zac 9,10. 

72,17 Tercera petición. El nombre se perpetúa en la memoria y la descendencia. Ese nombre recibirá la felicitación de los venideros y se usará como modelo y prenda de bendición, como el de Abrahán: Gn 12,3; 18,18; 22,18. Un rey con algo de patriarca.

Transposición cristiana.
La tradición rabínica aplicó este salmo al Mesías; los cristianos lo identificaron con Jesús de Nazaret. Una vez planteada la trasposición global, podemos descubrir resonancias particulares en el NT. Reino eterno: Lc 1,33; universal: Mt 2,2;Ap 15,4; reino de justicia y paz: Mt 5,6.9; Rom 14,17; 1 Co 1,30; Ef 2,14; Sant 3,18; victoria sobre el opresor: Lc 11,21 s; Ap 17, 15; a favor de los pobres: Mt 5,2; Lc 4,18; 7,22; rescatar o vengar: Tit 2,14; Mt 20,28; Ap 6,10. Que viva: Ap 1,18; Rom 6,9; reconocimiento universal del nombre: Flp 2,10; Ap 14,6. La lista se podría ampliar fácilmente.    

Evangelio. Mateo 1,1-17.

1 Génesis de Jesús, Mesías, hijo de David, hijo de Abrahán:
Abrahán engendró a Isaac,
2 Isaac engendró a Jacob,
Jacob engendró a Judá y a sus hermanos,
3 Judá engendró, a Tamar, a Fares y a Zará,
Fares engendró a Esrón,
Esrón engendró a Arán,
4 Arán egendró a Aminadab,
Aminadab engendró a Naasón,
Naasón engendró a Salmón,
5 Salmón engendró, de Rajab, a Booz,
Booz engendró, de Rut, a Obed,
Obed engendró a Jesé,
6 Jesé engendró al rey David,
David engendró, de la que fue mujer de Urías, a Salomón,
7 Salomón engendró a Roboán,
Roboán engendró a Abías,
Abías engendró a Asaf,
8 Asaf engendró a Josafat,
Josafat engendró a Jorán,
Jorán engendró a Ozías,
9 Ozías engendró a Joatán,
Joatán engendró a Acaz,
Acaz engendró a Ezequías,
10 Ezequías engendró a Manasés,
Manasés engendró a Amón,
Amón engendró a Josías,
11 Josías engendró a Jeconías y a sus hermanos, cuando la deportación a Babilonia.
12 Después de la deportación a Babilonia, Jeconías engendró a Salatiel,
Salatiel engendró a Zorobabel,
13 Zorobabel engendró a Abiud,
Abiud engendró a Eliacín,
Eliacín engendró a Azor,
14 Azor engendró a Sadoc,
Sadoc engendró a Aquín,
Aquín engendró a Eliud,
15 Eliud engendró a Eleazar,
Eleazar engendró a Matán,
Matán engendró a Jacob
16 y Jacob engendró a José, el esposo de María, de la que nació Jesús, llamado el Mesías.
17 Por tanto, las generaciones desde Abrahán a David fueron en total catorce, desde David hasta la deportación catorce, y desde la deportación a Babilonia hasta el Mesías catorce.

EXPLICACIÓN.

1. Título. Va a describirse la nueva creación (génesis), que existe en la persona de Jesús y se continúa por obra suya (cf. 28,1: "el primer día de la semana"). Hijo de David: le corresponde el carácter real; hijo de Abrahán: en él se cumple la promesa del universalismo: la bendición para todos los pueblos y la descendencia ilimitada (Gn 17,4s; 18,18; 21,17s).

2-17. En Jesús Mesías va a culminar la historia de Israel. Mt arregla las generaciones para establecer seis septenarios o "semanas de generaciones". Jesús, el Mesías, comienza la séptima semana, que representa la época final, dentro de la historia, para Israel y para la humanidad. La octava será el mundo futuro. La genealogía se interrumpe (17): a Jesús pertenece toda la tradición anterior, pero no está condicionado por una herencia histórica; su único Padre será Dios, su ser y su actividad reflejarán los de Dios mismo. No es un producto de la historia, sino una novedad en ella.